El nombre científico de este singular lorito, es Micropsitta pusio, comúnmente conocido como el loro enano. Este pequeño loro mide aproximadamente entre 8 y 10 centímetros de longitud y pesa entre 30 y 40 gramos. Su plumaje es predominantemente verde, con matices amarillos y azulados en la cabeza y las alas. Posee un pico corto y robusto, ideal para alimentarse de frutas y semillas, y sus patas son fuertes, lo que le permite agarrarse a las ramas con facilidad. Los machos y las hembras son similares en apariencia, aunque algunas subespecies pueden presentar ligeras variaciones en el color.
Se encuentra principalmente en las selvas tropicales y bosques húmedos de las islas del Pacífico, especialmente en Nueva Guinea y algunas islas cercanas. Prefiere áreas densas y frondosas, donde puede moverse entre las ramas y encontrar refugio. Su hábitat está típicamente compuesto por árboles altos y vegetación abundante.
A pesar de su pequeño tamaño, es conocido por su gran agilidad y capacidad para saltar de rama en rama. También destaca por su vocalización, que consiste en una serie de trinos y chirridos melodiosos, aunque no es tan ruidoso como otros loros más grandes.
La dieta del Micropsitta pusio se compone principalmente de frutas, semillas, néctar y brotes tiernos. Su pico adaptado le permite acceder a una variedad de alimentos, y se alimenta principalmente en la parte alta de los árboles, donde busca alimentos en las flores y hojas. Su alimentación juega un papel importante en el ecosistema, ya que ayuda en la polinización y la dispersión de semillas.
Su hábitat se caracteriza por ser denso y frondoso, con una abundante vegetación que incluye árboles altos y diversas especies de plantas. Prefiere áreas con un rico dosel arbóreo, donde puede moverse con agilidad entre las ramas, lo que le permite encontrar alimento y refugio.
En cuanto a su estado de conservación, el Micropsitta pusio es considerado como una especie de menor preocupación por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), aunque su hábitat está amenazado por la deforestación y la pérdida de hábitat debido a la agricultura y la explotación maderera. La conservación de su entorno natural es crucial para asegurar la supervivencia de esta especie y su papel ecológico.
MVZ ESPECIALISTA ELSA DIÉGUEZ B.
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