Los océanos se han convertido en el mayor vertedero de plástico . Su acumulación es difícil de estimar, pero los investigadores utilizan cifras que ilustran la magnitud del problema: cada año entran al mar entre 48 y 12,7 millones de toneladas de plástico.
Las especies marinas son vulnerables a los desechos plásticos, grandes y pequeños, aunque la mayoría de las investigaciones hasta la fecha se han centrado en la contaminación de los océanos y menos en sus habitantes. El estudio, publicado en la revista Science, se centró en cómo las partículas de plástico afectan el desarrollo de las larvas de peces, y la autora principal, Oona Lennstedt, dijo que los hallazgos eran "muy preocupantes".
Las larvas ingieren partículas de plástico de menos de cinco milímetros, principalmente microesferas de plástico utilizadas en cosméticos o productos de higiene como la pasta de dientes. Los científicos dicen que esta dieta puede causar problemas reproductivos y amenazar su supervivencia. Investigadores de la Universidad de Uppsala (Suecia) realizaron experimentos de laboratorio con lubinas y lucios introducidos en acuarios y descubrieron que las larvas de peces expuestas a partículas de plástico durante el desarrollo cambiaban su comportamiento y crecían más lentamente. Esto significa que su mortalidad aumenta.
Los peces están en problemas, puesto que eligen comer estos plásticos. Esto se debe a que los plásticos contienen algún elemento químico o visual que incita a los peces a consumir. Por tanto, las larvas que encuentran estas partículas de plástico las ven como un recurso y creen que deben consumir grandes cantidades de partículas de plástico. Incluso se compara con los adolescentes que comen el famoso “fast food”.
Los investigadores también encontraron que cuando las larvas de peces se colocaron en el mismo tanque que sus depredadores naturales (lucios jóvenes), los expuestos a partículas de plástico fueron capturados y comidos cuatro veces más rápido que aquellos no expuestos a partículas de plástico.
El plástico no sólo impide su crecimiento sino que les provoca la muerte a estas especies marinas. Sino que las presas transmiten el plástico a los depredadores cuando son consumidos, incluyendo a los seres humanos como depredadores de algunos pescados. Entonces realmente al final se está haciendo una ingesta de plástico en la dieta humana.
Se ha creado una contaminación tan grande que incluso se han encontrado nuevas especies que residen en el fondo del océano con plásticos dentro de sus organismos. Demostrando que el plástico ha llegado hasta lo más profundo de nuestro mar.
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