El género Aotus, comúnmente conocido como micos nocturnos o monos de noche, incluye varias especies de primates que se caracterizan por su actividad nocturna, un rasgo poco común entre los primates del Nuevo Mundo.
Estos monos son de tamaño pequeño a mediano, con una longitud corporal de entre 24 y 37 cm, más la cola que puede alcanzar hasta 40 cm de largo. Pesan entre 700 y 1,200 gramos. Una de las características más notables de Aotus es su cara redonda con grandes ojos, adaptados para la visión nocturna. Su pelaje varía en tonos marrones, grises y anaranjados, lo que les proporciona un camuflaje efectivo en los ambientes selváticos.
La dieta de los micos nocturnos es omnívora. Se alimentan principalmente de frutas, hojas y flores, pero también complementan su dieta con insectos, pequeños vertebrados y huevos de aves. Gracias a su actividad nocturna, tienen menos competencia por alimentos que otros primates diurnos, lo que les permite aprovechar una amplia gama de recursos.
Una de las características más extraordinarias de los micos nocturnos es su organización social y comportamiento monógamo. A diferencia de muchos otros primates, Aotus forma parejas monógamas que permanecen unidas de por vida.
Cada año, la hembra tiene una sola cría tras un periodo de gestación de 133 días. La cría permanece con sus padres durante alrededor de dos años y medio antes de independizarse
Los machos desempeñan un papel activo en el cuidado de las crías, lo que es poco común en la mayoría de los primates. Esta cooperación familiar permite a los micos nocturnos cuiden a sus crías de manera más efectiva, ya que los machos ayudan a cargar a los pequeños y a protegerlos mientras las hembras se alimentan.
Los micos nocturnos se distinguen por su capacidad para emitir una amplia gama de sonidos utilizados para comunicarse. Los científicos han identificado entre 50 y 100 tipos diferentes de llamados, cada uno con un propósito específico. Estos primates son territoriales, y los machos aúllan cada noche durante una o dos horas mientras recorren entre 100 y 350 metros de su territorio. Son especialmente activos en noches de luna llena, cuando los machos emiten vocalizaciones para atraer a las hembras con intenciones de apareamiento.
El hábitat de los micos nocturnos incluye principalmente selvas tropicales y subtropicales de América del Sur y Central. Se encuentran en países como Colombia, Brasil, Perú y Ecuador, donde prefieren áreas de densa vegetación, tanto en bosques primarios como secundarios. Su habilidad para moverse por el dosel arbóreo les permite acceder a recursos que otros animales terrestres no pueden alcanzar.
Se adaptan a diferentes altitudes, desde el nivel del mar hasta áreas montañosas de más de 2,000 metros. Viven en parejas junto con sus crías de distintas edades, formando un grupo familiar que defiende un territorio de aproximadamente 10 hectáreas
En el ecosistema, Aotus desempeña un papel importante en la dispersión de semillas y el control de poblaciones de insectos. Como consumidores de frutas, ayudan a esparcir las semillas de diversas especies vegetales, contribuyendo así a la regeneración del bosque. Además, al alimentarse de insectos, ayudan a regular la abundancia de estos en su entorno.
El estado de conservación de Aotus varía según la especie, aunque en general se les considera de "Preocupación Menor" en la Lista Roja de la UICN. Sin embargo, algunas poblaciones están en declive debido a la destrucción de su hábitat, la caza ilegal y el comercio de mascotas. La deforestación es una de las mayores amenazas para estos primates, ya que dependen de los bosques densos para su refugio y alimentación.
MVZ ESPECIALISTA ELSA DIÉGUEZ B.
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