El Pulpo Maya es una especie nativa de las aguas costeras del Golfo de México y el Mar Caribe, incluyendo diversas áreas marinas cercanas a México. Es una especie emblemática de los ecosistemas marinos mexicanos, destacada por su importancia ecológica y cultural.
Así mismo es una especie de pulpo conocida por su importancia cultural, económica y ecológica en la región. Pertenece al orden Octópoda y es ampliamente estudiado por su comportamiento inteligente y capacidad de adaptarse a cualquier entorno en el que se encuentre.
El fósil de pulpo más antiguo que se conoce tiene 296 millones de años de antigüedad.
Características físicas
El tamaño del Pulpo Maya varía, pero típicamente alcanza una longitud de unos 30-60 cm de longitud total, incluyendo los tentáculos extendidos.
Coloración: Suele tener un patrón de coloración marrón con manchas más claras o bandas, que puede variar para camuflarse con su entorno. Así mismo, la sangre de los pulpos es azul ya que la molécula que transporta el oxígeno es la hemocianina en lugar de hemoglobina que da la coloración rojiza a la sangre de los mamíferos. Esta sustancia le permite conservar la temperatura corporal en aguas a temperaturas bajo cero.
Tiene la propiedad de camuflarse, cambiando de color y de textura imitando las superficies en las que se posa. En la piel tienen cápsulas de color que utilizan para expulsar como método de defensa o de cortejo
Estructura corporal: Tiene un cuerpo blando, sin esqueleto interno, con ocho tentáculos que utiliza para la locomoción y la captura de presas. Posee tres corazones que se ubican en la cabeza y cumplen la función de llevar sangre sin oxígeno a las branquias y uno más para llevar sangre oxigenada al cuerpo.
Además de utilizar sus largos tentáculos para desplazarse, utilizan una técnica de propulsión a chorro, la cual consiste en almacenar agua en su manto y después la expulsan con fuerza a través de la formación de un embudo que les permite desplazarse velozmente.
Son capaces de navegar laberintos, resolver problemas, encontrar soluciones e incluso tomar cosas sólo por diversión.
Papel en el ecosistema
El Pulpo Maya juega un papel crucial en el ecosistema marino como depredador. Se alimenta principalmente de crustáceos, moluscos y peces pequeños, contribuyendo a regular las poblaciones de estos organismos y manteniendo el equilibrio ecológico en su hábitat.
Se encuentra principalmente en aguas poco profundas y arrecifes de coral del Golfo de México y el Mar Caribe, incluyendo áreas cerca de la península de Yucatán y la costa de Quintana Roo en México.
El Pulpo Maya es conocido por su comportamiento inteligente, incluyendo habilidades de camuflaje y la capacidad de abrir conchas de moluscos para alimentarse. Tiene una vida relativamente corta, de aproximadamente 1-2 años.
Este octópodo se reproduce solamente una vez en su vida, por eso, en el tema de la pesquería de pulpo en nuestro estado, es importante respetar las tallas de captura y las vedas, permitiendo que el animal alcance la edad reproductiva, y que, llegada a esa edad, se reproduzca con el fin de lograr la sustentabilidad de la especie cuidándola de la extinción, ya que se trata de un animal susceptible a desaparecer por las características de su reproducción.
El macho muere poco tiempo después de fecundar a la hembra, y la hembra muere poco tiempo después de la eclosión de los huevos.
Estado de conservación
Aunque el Pulpo Maya no está actualmente evaluado en la Lista Roja de la UICN, enfrenta amenazas potenciales debido a la pesca intensiva y la degradación de su hábitat costero. La gestión sostenible de su pesquería es crucial para mantener las poblaciones saludables y el equilibrio ecológico.
Su conservación adecuada es esencial para garantizar su persistencia y el bienestar de los ecosistemas costeros donde desempeña un papel vital.
por MVZ Especialista Elsa Diéguez B.